Aunque es un lugar con difícil acceso porque la carretera no está en buen estado vale completamente la pena ir, las personas y el paisaje es increíble y definitivamente es mágico Yo lo compararía con las montañas flotantes de Pandora

La arquitectura del pueblo y la calidad humana de las personas. un lugar recomendado por sus museos y mirador del cristo redentor.

Un lugar muy simpatico, fuimos atendidos y guiados por uno de los dueños de la plantación, nos mostró los distintos procesos de pelado, secado, tostado y para finalizas probamos su cafe

Caminando unos 300m desde la plaza principal del pueblo en dirección del Santuario de la Madre Laura Montoya, se encuentra este B&B de propiedad de un Jericoano pero maneado por unos chicos extranjeros. El ambiente es tipico del B&B por gente joven, donde se toca quitara en la noche tomando una cerveza en grupo, donde los huéspedes se convierten pronto en amigos en un clima de pura internacionalidad. Los cuartos son pequeños pero limpios y con camas muy cómodas. Hay disponible también camarotes en cuartos de 8 personas. Los baños estan afuera de las habitaciones y muy limpios. No abunda el agua caliente porque se pone mucha atención al impacto ambiental. Los precios son honestos, la atención muy amable y detallista. El desayuno se cobra como extra pero el café en la mañana es gratis como requiere la buena hospitalidad antioqueña. MUY RECOMENDADO

Un lugar tranquilo, aseado, bonito y acogedor. El café de la mañana es recién molido y en una vajilla preciosa. Sus anfitriones nos amables y las normas son claras y amorosas lo que permite que la estadía sea muy cálida. Seguro, seguro volveré, guardan para mí un momento muy especial de mi vida

Las instalaciones son bastante bonitas y cómodas, el anfitrión es bastante amable, hay agua caliente en todo momento!!, queda cerca de todo, lo único malo es la cobertura del wifi, de resto, no tengo queja. un saludo!

Fue una experiencia muy divertida, el servicio es muy cercano y personal. Me alojé en una habitación privada con baño, para 3 personas, las camas son muy cómodas y el baño está muy bien. Te asesoran el todas las actividades para hacer en el pueblo y son super amables. Volveré siempre!

Un hostel maravilloso, por lo bonito, la calidez humana, el patio maravilloso, la simpatia de Jesus que hace que los viajeros se sientan como en casa. Fur muy dificil irse de las cometas. Lo pasamos genial. Es tranquilo, se duerme bien, muchas zonas para relajarse, cocina bien equipada.