Simplemente el restaurante de playa más perfecto que podríamos haber esperado, iba allí 3 veces en una semana. El personal es muy agradable, puedes conseguir tumbonas más baratas si almuerzas, te hacen una cuenta, nada es demasiado para ellas. La comida es excelente, algunos entrantes y 3 platos principales, normalmente 2 pastas y un pescado fresco, cambian a diario, el camarero traducirá algunos de los aspectos más locales en cuanto a qué tipo de pescado o salsa tendríamos. La playa es estupenda, muy poco profunda y arenosa y limpia, duchas junto al bar, baños muy limpios, o eso me dicen las mujeres, helados en oferta o los niños me dijeron, muy buena cerveza local, ¿qué es lo que me dije a mí mismo? No puedo recomendar esto lo suficiente, probamos uno al otro lado de la esquina, que estaba bien, pero no un parche en Il Paguro. No estoy seguro de si alguna vez volveremos, pero si lo hacemos (algún día me apetecen los conciertos en Lucca), vendremos el mismo día. Ciao