Digo escondido a simple vista porque es bastante difícil ubicar esta área en la mayoría de los mapas en línea o describirla de una manera distinta como un destino. En realidad, es un paseo artístico como parte del Disney Concert Hall, pero alrededor del exterior del edificio. Por su nombre, técnicamente es parte de los parques comunitarios del Estado de California. Lo encuentras ubicado entre las fachadas del Disney Concert Hall diseñado por Frank Gehry. Mientras sube los escalones de la entrada principal, manténgase a su izquierda y simplemente siga el camino serpenteante de cemento. Una de las primeras cosas que se destacarán son los árboles únicos repartidos por todas partes. Proceden en su mayoría de otros países y están marcados individualmente. A medida que continúe, encontrará un diseño circular cerca. A lo largo de su línea circular y sinuosa encontrará los nombres de los contribuyentes. Entiendo que algunas personas recorrerán este camino como parte de la autoterapia mental. Continúe caminando y encontrará más espacio abierto salpicado de plantas, árboles y obras de arte. En la parte de atrás llegará a un "árbol de coral desnudo" con la fachada de Disney Hall como fondo. Casi a la derecha está el más conocido Blue Ribbon Garden y la igualmente conocida fuente "A Rose for Lilly", también diseñada por Frank Gehry. Se compone de 8000 fragmentos de porcelana real de Delft. Siéntase libre de lanzar una moneda de la suerte. Nuevamente, observe las listas de contribuyentes grabadas en las piedras del piso a su alrededor. Es una pequeña joya de recorrido que puede realizar por su cuenta de forma gratuita. En realidad, hay un recorrido en video en la web que lo guía visualmente a través de todo esto. Sin embargo, es mejor ver y experimentar en persona real. Es un placer agradable que uno puede disfrutar mientras visita todos los otros museos importantes en el Distrito de Arte de Los Ángeles.

El cambio va muy rápido y lo que hace un año se sintió un poco extraño y extraordinario se siente como si se estuviera preparando para las grandes masas. Todavía vale la pena visitar, en términos de restaurantes, cafés y arte callejero en parte emocionante