Es un terreno para visitar en las mañanas y en las tardes y que no está tan alejado del centro de Bojacá. No recomiendo tanto el espacio para personas con algún tipo de discapacidad porque no tiene caminos definidos y es complejo caminar o andar por el terreno. Las piedras también se han conservado lo que más se ha podido. Más allá, el lugar no tiene más que ofrecer y no cuenta con señalización. Lleven igualmente bolsas para recolectar la basura porque solo hay un punto para tal fin. Se tiende a llenar mucho los fines de semana y algunos días (poco frecuentes) permanecerá cerrado, pero no hay avisos en sitios web o en el camino. Es una incertidumbre en tal sentido.