Este es un museo de poca concurrencia, pero muy interesante, porque muestra la vida común a través de la historia de Edimburgo. Se encuentra en Canongate, arteria parte de la Royal Mile, donde se encuentran una serie de pequeños museos, felizmente gratuitos. Me gustó mucho la representación del año 1820 de una procesión de zapateros del viejo Edimburgo en honor a San Crispín, el santo patrono del gremio de dicho rubro.