Esta Reserva Natural es muy grande ya que se extiende entre el sur de Trapani hasta Salina Grande. Hay una carretera al lado mismo de la salina que hace todo el recorrido.
Lo primero que destaca son los molinos, algunos en ruinas, otros restaurados, otro como museo y también los cúmulos de sal, la mayoría de ellos cubiertos con tejas de terracota.
Según nos indicaron aún se realiza la extracción en forma artesanal, aunque pudimos ver también plantas industriales. Esta sal tiene la consideración de gran calidad por ser rica en sales : yodo, flúor, magnesio y potasio lo que hace que sea cara y se puede encontrar en todos los mercados de Palermo en paquetitos con la indicación del lugar de procedencia.
También se pueden observar en las salinas bastantes aves y entre ellas flamencos.
Existe en la mitad del recorrido una parada donde hay un barco que realiza una excursión hasta una isla cercana , donde hay el museo, que circunda y regresa para que se puedan observar las salinas desde el interior del mar