Teníamos claro que en Oporto queríamos hacer un crucero por el Duero. Pero no queríamos el típico que hacen todos los turistas de un ratito y todos como sardinas en lata. Encontramos este crucero porque tenía muy buenas reseñas en TripAdvisor, y la verdad es que simplemente superó nuestras expectativas. Lo primero decir es que fuimos tres adultos y dos niños de 4 y 5 años. El crucero consistía en dos horas de crucero, pasando por los 6 puentes de la ciudad y llegando hasta el océano y después dar la vuelta y volver al puerto realizando el mismo camino . Todo esto aderezado con una pequeña merienda de productos locales, quesos, jamón, chorizo, vino... Vamos muy completito, tenían incluso zumo para los niños. Reservamos la hora de las 18.00 por lo que vivimos una puesta de sol espectacular desde un sitio privilegiado. Para el final dejo a los anfitriones del yate, fueron en todo el momento encantadores, se desvivieron por los niños, en todo el rato atentos a que estuviéramos bien. En resumen, un crucero espectacular que se sale de lo típico, y aunque sea un poquitín caro, vale hasta el último euro pagado.