Village Suites by Blue Mountain Resort
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Información
Descubre por qué tantos viajeros ven The Grand Georgian - Blue Mountain Resort como el hotel ideal cuando visitan Blue Mountains. Además de aportar la combinación ideal de calidad, comodidad y ubicación, ofrece un ambiente para familias con una amplia variedad de servicios diseñados para viajeros como tú.
Las habitaciones de Grand Georgian incluyen televisor de pantalla plana, frigorífico y cocinita para una comodidad mucho mayor, y los huéspedes pueden permanecer conectados con wifi de pago.
Conserje es uno de los servicios que ofrece el hotel. Su piscina también contribuirá a que tu estancia sea incluso más especial. Si vas en coche a The Grand Georgian - Blue Mountain Hotel, hay parking gratis disponible.
Si te gustan los restaurantes de comida mediterránea, Grand Georgian Blue Mountain se encuentra cerca de Tholos.
Blue Mountains también se conoce por sus museos de historia, como The Craigleith Heritage Depot, que no se encuentran muy lejos de Grand Georgian.
Para The Grand Georgian - Blue Mountain Resort tu comodidad y satisfacción son lo primero, y están deseando darte la bienvenida a Blue Mountains.
Ubicación
Opiniones
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El check-in de 5 personas tardó menos de 5 minutos. Excelente atención. Nos alojamos en el Grand Georgian Hotel. La suite muy bien diseñada. Una sala con sofá, poltronas, TV, kitchenette donde puede prepararse comida, lo cual disminuye los costos de estadía de varias personas. Una habitación con baño y otra en el ático. Cinco personas estuvimos cómodamente. Tengo años yendo a diversos hoteles y el servicio de limpieza de la suite (profunda, cuidadosa, completa, en detalle) era realmente de muy alta calidad.
Hay muchas opciones para divertirse: el Ridge Runner Mountain Coaster que, para el descenso, debía ser controlado manualmente por el conductor; todo un ejercicio de valentía cuando ya no se es un jovencito. Piscina indoors, Todavía había algo de nieve en las pistas para ski y snowboarding y con paciencia y buenos músculos podía subirse a pie por ellas.
Mención especial merece la armonía de la construcción del resort con el ambiente de la montaña. Se siente el respeto por la naturaleza. Hay varios lugares para alojarse, a gusto de distintas necesidades de los huéspedes. Tiendas de ropa, restaurantes, heladerías, chocolatería, supermercado. Es una especie de pequeño pueblo para el visitante.
Al Blue Mountain Village regresaríamos con todo gusto, para repetir la experiencia..
NOTA: El único detalle “discordante”: Mi nieta de 3 años estaba contrariada porque la Blue Mountain ¡¡no era de color azul sino marrón!!!
La preciosa ubicación
La habitación decorada con gusto, con cocina y bañera
Al lado de una pista de esquí, el telesilla queda en la puerta
Encantadores paseos peatonales, pueblo con tiendas, restaurantes y bares
Excelente servicio
En contra
Cama irregular e incómoda
Manchas de grasa en la alfombra
La pista de esquí es poca cosa... No es ninguna montaña
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