Bienvenido a Qube Hotel Heidelberg, tu segundo hogar en Heidelberg. Qube Hotel Heidelberg tiene como objetivo conseguir que tu visita sea lo más relajante y agradable posible, razón por la que tantos huéspedes siguen volviendo año tras año.
Durante su estancia en Qube Hotel Heidelberg, los huéspedes pueden visitar Carl Theodor Old Bridge (Alte Brucke) (2,1 km) y Altstadt (Old Town) (2,2 km), que son algunas de las principales atracciones de Heidelberg.
Las habitaciones de Qube Hotel Heidelberg incluyen televisor de pantalla plana y mesa de escritorio para una comodidad mucho mayor, y los huéspedes pueden permanecer conectados con wifi gratuito.
Terraza en la azotea, servicio de habitaciones y registro de entrada y salida exprés son algunos de los servicios que ofrece el hotel. Su desayuno también contribuirá a que tu estancia sea incluso más especial. Si vas en coche a Qube Hotel Heidelberg, hay aparcamiento privado de pago cerca disponible.
Durante tu visita, no dejes de ir a uno de los restaurantes de dumplings conocidos de Heidelberg como Wirtshaus zum Nepomuk, Vetter's Alt Heidelberger Brauhaus y Palmbrau Gasse, que se encuentran cerca de Qube Hotel Heidelberg.
No faltan cosas que hacer por la zona: explora populares castillos como Castillo de Heidelberg y Tiefburg Handschuhsheim.
Qube Hotel Heidelberg te acerca a lo mejor de Heidelberg, tratando de que disfrutes de una estancia relajante y agradable.
Habitaciones pequeñas, pero muy bien decoradas. Con control remoto de luces, televisión enorme y caja fuerte, por poner ejemplos. Muy cercano al centro (puedes bajar a la universidad dando un paseo, si no te atropella una bici o un patinete). Ahora bien, el desayuno es opíparo y de buena calidad. Tienen hasta un panal de miel.
Cuando entras al hotel no da buena impresión, es muy pequeño y lo peor es que hay un único ascensor para 4 personas, lo que supone para un grupo y sobre todo para los huéspedes una incomodidad. Las habitaciones son amplias y cómodas y los baños modernos. El buffet de desayuno está bastante bien.
Sólo nos quedamos una noche en este hotel. Lo elegimos por estar cerca de la estación central y del centro de la ciudad. Nos permitió dirigirnos a todos lados caminando. Un hotel muy silencioso, impecable en cada detalle, incluso con un selector de color de luz, y una pantalla enorme en la habitación, muy cómodo en todo sentido. Lo volveremos a elegir sin duda alguna. El staff muy amable.
Una muy buena opción de hotel en Heidelberg! la verdad es que al entrar,no te dice mucho, pero una ves que llegas a la habitación, sorprende, moderna, cómoda, amplio y completo baño. el personal del check in es amable, pero me gustaría destacar al del desayuno, ya que al margen del buen servicio,ofrecen un muy buen y variado desayuno. Un hotel en zona residencial y por tanto tranquila, y bien ubicado, con buenos restaurantes cercanos.
Habitaciones enormes y baños super nuevos y confortables. El personal además fue muy amable. Además en el hall había un espacio para hacer cafés y infusiones de forma gratuita. Si he de ponerle una pega, es el precio del desayuno, unos 17 euros por persona! Es cierto que había de todo pero me pareció un poco desproporcionado.
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