El torreon o Torrione es un edificio antiguo reformado y convertido en Hotel o Bed and Break fast. Cercano a la muralla, de la que seguramente formaba parte protegiendo la entrada a la ciudad. En su interior la decoración del bar conserva un poco de historia.
Hotel perfecto en el casco antiguo de Trento. Nuestras necesidades eran especiales ya que necesitábamos una habitación con silla de ruedas y sin barreras, y este hotel nos proporcionó eso e hizo que nuestro viaje fuera muy agradable y placentero. La recepcionista Natalia fue extremadamente amable y servicial al proporcionar todos los detalles sobre la habitación antes de que llegáramos a Trento. Ella nos reservó una habitación superior e hizo un video para enviarnos antes para asegurarse de que la habitación sea lo suficientemente espaciosa y accesible para sillas de ruedas. La cafetería de abajo es maravillosa y todo está a la vuelta de la esquina del hotel. Caminamos a todas partes y la estación de tren está a menos de 10 minutos a pie. La habitación es lo suficientemente fresca, limpia y acogedora. El estilo del hotel es muy agradable y tiene bonitas antigüedades alrededor del hotel y una habitación encantadora y acogedora. Natalia fue una anfitriona perfecta y recepcionista. Ella hace su trabajo al mejor! : ) Saludos ¡Saludos desde Austria!…
Teníamos una habitación funcional con una gran vista. La ubicación es excelente, hay muchos restaurantes cerca. Recomiendo Patelli's al otro lado de la calle. El estacionamiento era extra pero muy conveniente. El personal hará todo lo posible para que su estadía sea placentera.
Ayer fui a tomar 4 cocteles. Leí que el precio era de 3 € cada uno. En los dos primeros cócteles todo estuvo bien, pero en los dos segundos hicieron otra copa por error. Cuando pagamos, piden 4 € cada uno. Nos explicaron el error y nos ofrecieron tres chupitos gratis de una especie de “amaro”, pero seguimos pagando 16 euros. El camarero fue muy amable pero finalmente fue mentira. . deben respetar sus propios precios. No recomiendo este tipo de lugares y seguro que no volveré. No se trata de dinero, se trata de respeto.
Acogedor hotel rústico en el centro de la ciudad. Personal amable. Habitaciones muy bonitas, auténticas y limpias. El desayuno era super A poca distancia de un montón de buenos restaurantes y bares de vinos. Solo nos quedamos una noche de camino a Francia, pero nos hubiera gustado tener más tiempo. Volveremos a ver más de Trento y esperamos que Torrione Trento tenga una habitación para nosotros.
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