La búsqueda del hotel ideal en Niort no tiene por qué ser difícil. Bienvenido a Mercure Niort Marais Poitevin, una fantástica opción para viajeros como tú.
Disfrutarás de agradables habitaciones que incluyen aire acondicionado, y podrás estar conectado durante tu estancia, ya que Mercure Niort Marais Poitevin ofrece wifi gratuito a los huéspedes.
El hotel tiene recepción abierta 24 horas, servicio de habitaciones y conserje. Además, Mercure Niort Marais Poitevin ofrece piscina y bar para poder relajarte tras un ajetreado día. Hay parking gratis disponible para huéspedes con coche.
Mientras estés en Niort no te pierdas restaurantes barbacoa cercanos como Buffalo Grill Niort.
Si buscas algo que hacer, Le musée du Donjon de Niort (0,9 km) y CACP - La villa Pérochon (0,3 km) son buenas maneras de pasar el tiempo y puedes llegar andando desde Mercure Niort Marais Poitevin.
Mercure Niort Marais Poitevin te acerca lo mejor de Niort, haciendo que tu estancia sea agradable y relajante.
Habitación bonita... trato muy amable. hemos parado porque nos venia de camino, y la verdad es qeu una sorpresa agradable. El restaurant no esta nada mal tampoco. la habitación bien decorada y la cama muy comoda. el lababo tambien muy bien.
El hotel está muy bien situado a cinco minutos del centro. Las habitaciones amplias, bien cuidadas y limpias. La recepción moderna y acogedora. Nos alojamos un grupo de treinta personas y al dirigirnos a desayunar nos dirigieron a un local anexo al comedor y separado de este por unos diez metros. En el mismo nos encontramos con mesas redondas para unas ocho personas en las que destacaba una botella de zumo sin etiqueta y ocho croisants dos jarras una de café y la otra de leche y total ausencia de embutido o cualquier otro alimento salvo unos yogures y cuatro o cinco manzanas. Por curiosidad nos asomamos al comedor principal en el que había tres o cuatro personas y en el mismo había tortillas, zumos naturales, embutidos y otros alimentos como corresponde a un desayuno continental. El trato de la camarera que se nos asignó se correspondía con el de una carcelera que nos indicaba " o coméis lo que tenéis o no coméis. Lamentable. La buena imagen de este hotel por la noche se convirtió por la mañana en l de una pensión de los años cuarenta del siglo pasado. Quizá influyó en el trato el hecho de que fuéramos españoles?…
Es un hotel normal. Las habitaciones dobles son sencillas nada lujosas. El servicio sanitario esta separado del baño. El gimnasio es muy bueno cuenta con maquinas nodernas. El restaurant cierra a las 10 pm. El desayuno es muy bueno con alimentos variados. Cuenta con Wifi.
Habitación limpia y con todo lo necesario para pasar una buena estancia. Cama muy cómoda y facilidades en la habitación para prepararte café y té. Detalle de una botella gratuita de agua a la llegada. Wifi gratuito y a buena velocidad. Zona muy tranquila (junto a un cementerio), y a pocos minutos andando del centro. Cené una noche en el restaurante y muy normalito. El desayuno me pareció muy completo.
Recientemente renovado. Moderno y funcional. Muy comfortable, con piscina, gimnasio, sauna. Desayuno muy bueno (bufet) y abundante. Un lugar estupendo desde le que visitar el Marais Poitevin. Un lugar de cuento!.
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