Capítulo Trece es un hotel rural de pequeñas dimensiones, sólo cinco habitaciones, ubicado en el pueblecito segoviano de Maderuelo desde el que se puede explorar la zona de Riaza, Ayllón y los pueblos rojos de Segovia. Ocupa una hermosa casa de piedra restaurada arquitectónicamente con un gusto exquisito que combina acertadamente materiales viejos y modernos de manera armoniosa. Todas las estancias comunes están decoradas agradablemente y cuentan con detalles significativos, desde la sala de estancia con una chimenea que debe ser especialmente acogedora en los meses fríos, el pequeño jardín cubierto con una fuente de la que siempre mana agua en un susurro, o el spa dotado con sauna, baño turco y jacuzzi de grandes dimensiones. Nuestra suite, amplia, con ventanales enormes al paisaje de Castilla y cama de gran tamaño con dosel, se encontraba en un inmaculado estado de limpieza, y desde ella resultaba llamativo el silencio casi absoluto del que se podía disfrutar a lo largo del día. Si te lo puedes permitir y para redondear tu estancia de desconexión en pareja, recomiendo contratar el pack que incluye una hora de spa, así como cena y desayuno para dos, los cuales, tanto por su cantidad como por su calidad, con productos de kilómetro cero cultivados por los propios dueños del hotel, son altamente satisfactorios. La atención del personal es amable, constante e irreprochable, siempre buscando la comodidad del cliente y las medidas anti COVID seguidas creo que suficientes. En definitiva, una auténtica joyita escondida de alojamiento rural absolutamente recomendable si quieres desconectar en pareja durante un día o dos en tierras castellanas.…
Lo dicho anteriormente, el spa es normalito. Hay un circuito grabando a los huéspedes y al volver nos dimos cuenta de que nos habían retirado 300 € de la cuenta sin previo aviso, al llamarles nos dijeron que primero tenían que comprobar si habíamos tenido sexo en el spa y nos los devolvían. Dudo que esta práctica sea legal y no me parece un modo adecuado de proceder en un alojamiento de estas características, no creo que la gente se vaya a un hotel con spa a tener sexo en el spa por regla general y retirar 300 € sin previo aviso puede suponer un problema al cliente al no disponer de esa cantidad momentaneamente, aunque se devuelva. Da sensación de poca confianza y no está a la altura del resto de cosas que sí nos gustaron mucho.
El hotel lo tiene todo para pasar un fin de semana increíble. Limpieza y atención de diez; instalaciones y servicios excelentemente cuidados; decorado con mucho gusto y mimo, no le falta ningún detalle. Tuvimos la oportunidad de probar el desayuno y la cena, absolutamente recomendable, con productos exquisitos y en un ambiente acogedor y relajado. Tanto Fran como Isabel están muy atentos a cualquier necesidad del cliente. Lo recomiendo 100% y repetiré sin dudarlo!
Hotel perfecto para desconectar de la ciudad y relajarte en un hotel pequeño pero con todos los detalles . La cena fantástica y el desayuno de 5 estrellas . Déjate aconsejar por Javi sobre lugares que visitar o dónde comer .. te sorprenderás gratamente ;)) Recomendable 100%
Perfecto si buscas un sitio tranquilo y de ambiente familiar. Muy recomendable. El único pero, cuesta un poco llegar con el coche, por que las calles del pueblecito son muy pequeñas y estrechas y el gps falla un poco.
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