Jeyson y Miguel fueron excelentes anfitriones, siempre dispuestos a ayudar en lo que necesitarmos, las habitaciones estaban limpias, cómodas y silenciosas, a pesar de estar en la ciudad y la fiesta de La Candelaria, es un lugar perfecto para descansar. Cuenta con espacios para compartir con amigos y para leer un libro tranquilamente.
El desayuno desorganizado. Las habitaciones no son espaciosas como la muestran en la foto. Pagamos por una habitación con baño privado que no existía, sino que está separado por un vidrio, o sea no hay puerta. El lugar es muy ruidoso, se escucha todo de todos, incluso cuando alguien entra y sale del hostel. La ubicación es buena.
Precios razonables. El cereal con leche es gratis en el desayuno. Desayuno colombiano 10000 pesos. No hay parqueadero pero a la par hay uno que cobra 10000 toda la noche. David el dueño es muy servicial y atento. Los alrededores es tranquilo y se observa policía de turismo con frecuencia. Alrededor de 3000 pesos por un dólar.
Excelente ubicación, precio y servicio Nos ayudaron con el transporte para ir al aeropuerto. Las instalaciones son muy agradables, hay donde pasar un buen rato, una buena vista, una buena cerveza y sin salir del hotel
Un lugar muy particular con un estilo rustico y colonial, buena ubicación - muy céntrico cerca a la plaza de armas, a Monserrat y otros lugares, el trato a los huéspedes muy bueno!!!! las habitaciones amplias y cómodas, se realizan BBQ y al algunas ocaciones mini conciertos para los huéspedes.
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