Toda una experiencia sin igual, las regulaciones para visitar la isla se comprenden perfectamente al llegar y darte cuenta que no estás visitando un destino turístico común como en cualquier país, literalmente estás como observador de un ecosistema en perfecto equilibrio, cualquier sustancia alimento o conducta inadmisible alteraría dramáticamente el entorno, muy comprensible que no puedas tocar ningún animal, mucho menos alimentar o molestar, los visitantes debemos respetar totalmente las regulaciones para conservar este paraíso, el hotel Cabañas Don Jorge tiene la mejor ubicación por ser de los únicos hoteles que están a unos metros de la mejor playa para hacer snorkel, les pido que lleven sus propios equipos, nosotros tuvimos la suerte de llevar unos flotadores para adultos que compramos en una tienda de deportes aquí en México y eso hizo la difencia de poder adentrarnos con toda la tranquilidad a zonas más profundas de las playas y arrecifes, pasamos horas flotando y observando la enorme vida marina (cientos de peces, lobos marinos, mantarrayas, erizos, tortugas, morenas etc) los flotadores (que son como unos cinturones del material de los chalecos salvavidas) si ocuparon gran parte de la maleta pero bien valió la pena ya que en la isla te los rentan por hora y en dlls. Queremos agradecer a María y Francisco los encargados de Cabañas Don Jorge ya que fueron excelentes anfitriones, nos dieron tips son muy amables, alegres y platicadores, en general toda la gente de la isla es muy amable (no están maleados como los que somos de grandes ciudades) y puedes dejar tus cosas en la playa con toda tranquilidad mientras te metes al mar, ojo, no hay camastros no venden comida en la playa, no hay vendedores ambulantes en la playa, no ves gente emborrachándose y ni pensar en dejar basura o fumar en la playa, todo está tan bonito que ni se te ocurre pensar en hacer algo que moleste a la fauna, ahí te das cuenta que varias especies podemos convivir en perfecta armonía.…
El lugar es bonito y con naturaleza. Las cabañas son amplias, La Española, que fue en la que nos quedamos, tenía una cama matrimonial y una litera, el baño es muy pequeño. Lo mejor es la cocina privada que tiene vista a la Playa Mann, sin duda lo mejor ya que el hotel, como la mayoría en Galápagos, no incluye desayuno. Tener en cuenta que no es al pie de la playa como dice en booking pero si es frente a la playa y cerca del Centro de interpretación, Cerro Tijeretas, Playa Mann y Punta Carola. En general me pareció que hacía falta limpieza y mantenimiento, por ejemplo, el ventilador de techo sonaba súper fuerte y no lo podíamos prender y el cuarto tenía polvo. Aunque es bonito el hotel, la segunda noche nos cambiamos porque en cuanto a lo que ofrecen existen opciones más baratas y más cerca del centro de San Cristobal.…
He llegado ya dos veces a este hotel, con dos experiencias diferentes. La primera vez llegue a las cabañas sencillas, todo depende de qué este buscando uno. La habitación tenia una cama doble y una sencilla, con ventilador y una tv muy pequeña sin tv cable. El baño bastante pequeño. Este año me decidí por una de las suites que están en la parte de arriba. Hay bastante diferencia. Hay dos, una pequeña y a lado una bastante mas grande. La pequeña suficiente para dos personas, el cuarto esta separado del área de afuera, cocina, lavaplatos y una refri pequeña. Ya la habitación tiene aire acondicionado, mucho mas cómoda. La suite donde llegaron mis amigos, es mucho mas grande, con dos habitaciones, una con cama doble abajo, y un segundo piso con una cama doble y dos sencillas, incluso un pequeño balcón. Las dos suites comparten un "area social" con vista al mar. Pero lo mejor del hotel es definitivamente su ubicación. Es de los pocos que esta cerca del mar, aprox a 2 min caminando. Esta a lado esta el centro de interpretación y el camino a tijeretas que es de lo mas lindo que tiene la isla. La atención siempre es buena.…
Ubicación absolutamente excepcional, justo enfrente de Playa Mann (también conocida como central de leones marinos), cerca de los restaurantes, y también a solo una corta caminata de Punta Carola y las otras playas cercanas (donde verá aún más leones marinos, y muy pocos si ninguna persona) . El hotel en sí ofrece alojamiento muy básico, pero está extremadamente limpio, ofrece vistas parciales al mar y tiene buen Wi - Fi en las áreas comunes. Por el precio que pagué ($ 36 por una habitación individual), tiene una excelente relación calidad-precio.
Tuvimos una muy agradable primera impresión cuando llegan por la mañana, pero este cambió rápidamente cuando llegamos a nuestra cabaña después de la cena y nos dimos cuenta de que estaba lleno de insectos, cucarachas dentro de la cama, hormigas rojas en la ducha. . . No es exigente para estas cosas, especialmente después de viajar bastante por el mundo, pero este era demasiado muchos insectos espeluznantes por todas partes! De hecho reservamos tres cabañas (3 x 2 personas) pero terminó todo en un problema debido a este. Nos explicó nuestro encuentro amistoso al propietario el día siguiente, pero no ofreció ninguna solución ni reembolso (aunque estábamos utilizando 1 3 en lugar de la Hut inicialmente reservado y pagado por adelantado! ). El desayuno es bueno, pero los primeros lo puedes conseguir es de 7 de la mañana (un poco estrecho, teniendo en cuenta los horarios de visita de las Galápagos). Finalmente nos fuimos y encontramos otra en forma mucho mejor, más limpio y a un precio más bajo! Este lugar necesita un fuerte ánimo! Como es una pena, ya que la ubicación es agradable y tranquilo.…
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