GRACIAS POR TODO! Hemos sido recibidas con mucha calidez desde el primer dìa, la cocina estaba super limpia, hay mucho sentimiento de cooperaciòn y respeto, lo cual es super valioso para tener una experiencia perfecta en un hostel. Nadie toca tus cosas en la cocina, las camas estaban perfectamente limpias tambièn. En la recepciòn hay mucha buena onda, y es imposible no hacerse amigues :)
Todo estupendo! El personal que trabaja ahi son unos encantos! Super buen ambiente. El barrio es muy agradable, a pocos minutos andando de la playa de Copacabana. El hostal destaca por su limpieza, las habitaciones son confortables, con poco ruido por la noche (se duerme super bien). El desayuno está muy rico con frutas tropicales y bollería casera! Disponen de una super terraza! Me encantó lon eventos que organizan ahí (noches de forro). Recomiendo sin duda alojarse a Aquarela do Lema! Y me hubiera gustado quedarme más tiempo allí! Si vuelvo a Rio, sin duda volveré a ese hostal :)
El personal del hostel fue muy amable desde el momento en que llegué, siempre estaban atento a todo, te daban recomendaciones de cosas por hacer y conocer y por las noches, organizaban salidas grupales a distintos lugares de Rio. Si vas solo, es un lugar en el que puedes conocer muchas personas y hacer nuevos amigos. Sin duda el mejor hostel en el que me he hospedado hasta ahora.
las habitaciones impecables, las camas comodas, El baño impecable amplio, con las duchas separadas con los elementos basicos de higiene a tu disposicion. La cocina igual, el desayuno, completo, con panaderia hecha en casa ingredientes naturales. el rooftop!! que da al mar y a la favela...precioso. Te alquilan la tarjeta de la bici ITAU por 10 reales por dia!!!!!
Me hospedé con dos amigas para pasar año nuevo en Río. La realidad es que el hostel es muy distinto a lo que me había imaginado. En cuanto a infraestructura, es por lejos el mejor hostel en que me hospedé. TODO SUPER LIMPIO, super ordenado y super cómodo! Algo que nos sorprendió mucho es que nos brindaran toallones, shampoo y jabón, cosa que no se suele dar en ningún hostel. El desayuno también es de los mejores. Variedad de frutas, jamón, queso, panes, bebidas, hasta waffles con muchas mermeladas. El hostel es atendido en su mayoría por voluntarias, las cuales siempre están disponibles para ayudarte. Critico un poco la falta de capacitación por parte de los dueños hacia algunas de las chicas, lo cual hizo que algunas veces no nos dieran información del todo correcta, o se demoraran en algunas gestiones. Pero de más está decir que las voluntarias le ponen toda la onda del mundo y que el hostel es lo que es gracias a ellas. Los dueños también son muy amables, al vivir ahí con sus dos hijos pequeños no van a encontrar un hostel lleno de fiesta y actividades nocturnas, pero sí un lugar muy cómodo y en el que es muy fácil sentirse como en casa. El hostel tiene una terraza HERMOSA que funciona hasta la 1 de la mañana aprox. El hecho de que esté ubicado al ingreso de una favela pacificada no es para nada peligroso, de hecho me he sentido más a gusto ahí que en otros lugares de Río. En frente hay una pizzería que es altamente recomendable, y a aprox. 100 metros en descenso se encuentra el Bar de Didi 2.0, que sin dudas es el mejor lugar donde comí durante mi estadía. Otra recomendación es subir en moto por 3 reales hasta el hostel, ya que a veces la subida cansa bastante. En síntesis, creo que cuando viajo a Río busco un ambiente más festivo, pero la realidad es que este hostel supero todo el resto de mis expectativas y más. Lo super recomiendo.…
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