Si buscas un hotel boutique romántico en Ribadeo, no te pierdas Hotel Mi Norte.
Para que te sientas como en casa, las habitaciones en el hotel boutique incluyen televisor de pantalla plana, aire acondicionado y mosquitera, y mantenerte conectado es fácil, ya que hay wifi gratuito disponible.
Los huéspedes tienen acceso a conserje durante su estancia en Hotel Mi Norte. Además, Hotel Mi Norte ofrece bar, lo que hará tu viaje a Ribadeo incluso más gratificante. Y otra ventaja es que hay parking gratis disponible para los huéspedes.
Cuando estés en Ribadeo, es posible que te apetezca probar tapas en algún restaurante cercano, como Cafeteria La Lira.
Si te interesa explorar Ribadeo, visita una ruina antiguas como Fuerte San Damián.
El personal de Hotel Mi Norte está deseando atenderte durante tu visita.
Hemos estado en ese lugar de ensueño, desde la llegada... La amabilidad y profesionalismo del equipo nos impactó, una cálida atención de Elvira, los desayunos indescriptibles y magníficos la paciente y cariñosa instrucción de Cristina, belleza y orden en los cuartos que nos hicieron viajar al cine en Hollywood con sus habitaciones temáticas. En pocas palabras... ¡Soñando con volver!
Hotel precioso. Una temática muy original,basa en películas. Estuvimos en la habitación , todo sobre mi madre, de Almodobar. Elvira, nos recibió y nos atendió estupendamente. Nos enseño parte del hotel y sus suite. Desayuno rico y casero
Una estancia de diez. La mujer que nos atendió mostró atención constante para que no nos faltase nada. La habitación espectacular, nos decidimos por la suite del "lago azul". Amplia, cómoda, limpia y con una pequeña terraza muy agradable. El desayuno súper rico y variado, todo natural, casero y servido al momento. Un auténtico placer. Volveremos
Llegamos a este Hotel después de haber reservado a través de Booking. Por las opiniones, nos pareció muy bueno y quedaba cerca de nuestro propósito de visitar Ribadeo y la Playa de las Catedrales. Al llegar, ves de una mansión pintada en rojizo, con un terreno ajardinado alrededor, varias dependencias separadas unos metros entre si y una verja que lo circunda todo. Exteriormente el lugar está bien cuidado y causa una buena impresión, aunque parece mas una casa particular que un hotel. Tal vez sea por la visión que nosotros tenemos de los hoteles en la costa mediterránea. Nada más entrar, encuentras una pequeña recepción y una escalera que descubrimos llevan a las habitaciones interiores. La primera impresión fue un poco decepcionante. Por la puerta lateral abierta, descubrí un mediano salón, con varios sofás, librería y un ambiente muy recargado de objetos; me pareció en un primer momento, oler a humedad, como si fuera poco ventilado. Hecho el registro reglamentario, se nos asignó una suite. Para ello debemos dirigirnos al cubierto exterior, totalmente acristalado, con correderas de aluminio y de reciente construcción. Se nos da a elegir entre la estancia de: 20,000 leguas de viaje submarino o el Gran miércoles". Ambas son hermosas, grandes, lujosas y muy acogedoras. Elegimos la segunda. Una vez instalados, comprobamos que todo está perfecto, dispones de todo lo necesario, limpio y exquisitamente decorado. Un baño moderno y una amplia y cómoda cama. Tenemos además un pequeño y personal patio exterior, con mesita, sillas y tendero para la ropa. Nos sentimos muy a gusto y encantados con nuestra suerte. Saliendo de la habitación y compartido con las otras suites, disponemos de un salón biblioteca, con mesas, sillas y tumbonas por si se desea tomar el sol. Todo ello acristalado, bien decorado y muy luminoso. Desde ahí, podemos acceder fácilmente a nuestro automóvil a menos de 25 m., abriendo la verja que circunda el terreno, algo que se agradece si llevas algo más de equipaje. El desayuno se efectúa en el primer piso de la mansión principal. Hay que reservar hora pues el espacio es bastante reducido y se come por turnos. No hay productos salados, pero si pan, bollería, tartas, mermelada, mantequilla, quesos o jamón dulce y frutas. Los yogures caseros están deliciosos. La Playa de las Catedrales se encuentra a 3 Km. del hotel, pudiendo llegar a ella por carretera o bordeando la costa, en un bonito y pintoresco recorrido. Conclusión: Recomendamos totalmente el Hotel y no nos importaría volver otro día. Esta fue mi experiencia después de pasar dos noches en una suite del Hotel Rural Mi Norte, no puedo opinar del resto de habitaciones, pues no tuve oportunidad de estar en ellas. Con nuestro agradecimiento a Elvira por sus amables atenciones.…
El trato recibido es inmejorable, en todo momento están pendientes de que la estancia sea perfecta. Todo súper limpio y precioso. El sitio muy acogedor y muy bonito. La ubicación perfecta para conocer la zona. Seguro que volveremos!! Muchas gracias Susana por todo!!!
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