Llegamos a Cartagena y nos recomendaron las islas de Barú, fuimos a almorzar por recomendación de nuestros amigos que estaban hospedados allí, el hotel es espectacular, lleno de detalles y muy limpio, hablamos con...
Visité este lugar con mi familia, la atención es excelente desde el momento en que llegas y las instalaciones están súper aseadas. La carta tiene buena variedad y el sabor delicioso, los cócteles también...
El lugar es bello, el servicio es bueno, la comida buena sin embargo tienen serios problemas administrativos, en mi caso no tenían mi cuenta en el sistema y tuve q recordar todo lo consumido...luego cuando ya había...
No estuve alojado en este hotel, pero pase toda una mañana disfrutando de sus instalaciones y una playa increible. Hotel con una calidad mucho mayor a la media de la Isla, tipo Resort, con mucho turista que solo...
Empezando porque la playa es paradisiaca, el mar es hermoso, tranquilo, perfecto para divertirse, nadar, practicar algunos deportes acuaticos etc. las cabañas son muy tranquilas, la comida es deliciosa, la arepa d...
En general, la oferta de hospedaje en playa blanca es bastante precaria. Sin embargo, recomiendo totalmente hospedarse aunque sea una noche para poder disfrutar la zona antes y despues del arribo masivo de turistas...
The price is too high for what they offer you. Showers do not work and the breakfast is simple. It all looks very boring. The owner is a lovely lady, but the price is way too high when you compare it to other hostals.
Sabíamos que íbamos a un eco-hotel y que el alojamiento era sencillo, pero nos encontramos un establecimiento en el que solo se podía dormir. Las zonas comunes, jardin exterior está hecho un desastre, solo con quitar las cosas rotas y mejorando el espacio, ganaría mucho. El recibimiento fue inmejorable por parte de María. Ella es la que se encarga de preparar los desayunos y las comidas. En general, los servicios son caros en comparación con otros lugares, 15.000 pesos el desayuno (sencillo) y las comidas y cenas (muy basicas sobre 30.000 más la bebida). Solo tienen luz a partir de las 18h y sobre las 23h se acaba. No ayuda en absoluto al hotel la presencia de Flor, una mochilera que vive de hamaca en hamaca, muy colgada y que pretende dar servicio a los clientes. Lo único que hace es criticar la gestión de María y quejarse por todo. Le preguntamos donde estaba la playa y nos llevó al hotel abandonado de un narcotraficante, un lugar sucio, sin playa en condiciones. Por la tarde y por nuestra cuenta descubrimos las playas libres de la isla, nada que ver. Con ella tambien hicimos la excursión del plancton, se quejó todo el rato porque no quisimos volver en lancha. La excursión merece la pena, aguantarla no. El establecimiento no permite pagar con tarjeta y eso es un incoveniente para los viajeros.…
Maria og Jose es la gente más dulce. Ellos te ayudarán con todo. ¡Hace buena comida! Las camas y las habitaciones son muy simples. Buenas hamacas para relajarse. Cerca del pueblo y del "privado" y hermoso lugar de baño y bronceado.
Precio muy razonable para una habitación decente. La familia es muy acogedor y le ayudará a planear actividades. No hay necesidad de reservar a través de un gran operador. Ir con Alejo en su bote en un tour privado! No te pierdas el buceo y excursiones de plancton! Increíble
Es la mejor experiencia. La comida y el servicio es excelente y con buenos precios.Tiene un buen ambiente y queda cerca del pueblo y de varias playas lindas. Buena ubicación en la isla. La señora Maria y el señor Jose son lo mejor.
¿Es el propietario o administrador de este establecimiento? Solicite su perfil gratis para responder las opiniones, actualizar su perfil y mucho más.
Solicitar su perfil