Estuve el otro día en este bar con unos amigos tomando un aperitivo y, habiendo vivido unos años en Italia tenía las expectativas bastante altas y no me iba a conformar con cualquier cosa, pero mi sorpresa llegó al probar la focaccia que ofrecen aquí....Desde luego no tiene comparación con ninguna otra que haya probado en Palma y nada que envidiar a las que ya probé en Italia. Repetiré experiencia principalmente para volver a comerla. Muchas gracias por esa tradición y focaccia caseta que se nota está hecha con amor.Más