Como titulo, descubrimos este restaurante paseando por este agradable pueblo toscano. Se haya situado en una especie de sótano, seguramente me explicó mal, que le da un aspecto medieval y muy acogedor. La comida nos gustó muchísimo, pasta, carne, postres... Los camareros muy profesionales y...serviciales, destacar que también se trata de una tienda de vinos donde puedes adquirir los magníficos caldos del Chianti. Volveremos.Más