Estuvimos en familia para pasar fin de año, es un hotel tranquilo, la vista hacia la represa de Guatapé es inigualable, las cabañas son bonitas y es muy tranquilo, in embargo de decir:
- No es un lugar para ir con niños, no hay nada para ellos, ni un parque, se aburren mucho. Algunas cabañas tienen jacuzi, pero de resto un niño no tiene nada que hacer, lo recomiendo solo para adultos.
-El trasporte es tenaz...debes parquear tu vehículo en la parte de abajo y tienes dos opciones, caminar (es camino de barro, piedras y empinado, oscuro) o, pagar un moto taxi (Tuk Tuk) para movilizarte, el cuál vale $4,000 pesos colombianos (U$1,3) y hasta par ir al restaurante debes pedirlo, en un día normal debes tomar unos 8 servicios de transporte, o tomar la decisión de caminar a tu propio riesgo, no es recomendable que adultos mayores caminen.
- El restaurante es muy rico, hay buena atención y recomiendo las pizzas. Sin embargo tienen un área de playa desaprovechada, deberían usarla para incluir actividades para los huéspedes, ya que a las 9pm se acaba el servicio de restaurante.
-Los deportes náuticos con bastantes costosos.
-Salir al pasear por el pueblo es un buen plan, sin embargo en temporada alta es muy difícil encontrar parqueadero, hay inseguridad, gente borracha y para las personas que viajamos con niños no es muy agradable. Incluso casi nos atropella un moto carro que iba siendo conducido por una persona en estado de embriaguez.
-El paseo en el crucero local es agradable.
En general recomiendo el hotel para parejas, no para familias. Creo que los precios son altos para lo que ofrece el hotel, algo importante, el clima en Guatapé es muy varibale, en el día hace calor y nuestra cabaña no tenía aire acondicionado ni ventiladores... de noche es templado, más no frío.