El hotel Esperanza, en playa Carrillo Guanacaste, es un hotel con muchas bondades: es cerca de la playa, puedes ir a pie y estar ahí en cinco minutos, las habitaciones son cómodas, sumamente limpias, un spa muy bonito y relajante, así como una linda piscina, pero sobre todo, cuenta con lo más importante, unos propietarios que te tratan desde que llegas hasta que sales, como si fueras de su familia, realmente te sientes como en casa. Por tantas bondades del hotel, pero sobre todo por el trato de sus dueños, volveré cada vez que pueda.
Gracias a don Denise y a doña Karina por tantas atenciones y amabilidad..