La mejor cena de mi vida!!! Si, así como se lee. Había escuchado mucho sobre este restaurante enclavado en la mitad de la isla, retirado de la zona turística tradicional. Podría escribir por horas detalle a detalle todo lo bueno que vivimos ahí, pero lo voy a tratar de resumir, El lugar esta montada y decorado al detalle con muy buen gusto y calidez visual. El servicio fue muy bueno, al llegar tenían ya nuestra mesa que habíamos reservado y ya después de tener nuestras bebidas pedimos cambio de mesa y accedieron muy amablemente, gracias chicos se que los hicimos trabajar doble. (aclaro, la mesa inicial también estaba muy bien). Los alimentos por nota, una preparación llena de detalles en el emplatado, los sabores perfectamente definidos, raciones abundantes. Íbamos celebrando nuestro aniversario y nos sorprendieron con dos bebidas espumosos decoradas como cortesía de la casa. En todo momento estuvieron pendientes de nuestras necesidades pero dándonos el espacio de privacidad para nuestra platica, aun cuando el área superior es muy pequeña, nos sentimos muy plenos y respetados en nuestro espacio. Cuando parecía que la experiencia no podía ser mejor, llega la sugerencia de los postres, la elección fue pastel de 3 chocolates, y de nuevo otra sorpresa con el tamaño y el sabor, en palabras del mesero nos contó que fue horneado por la dueña en persona. Así que les puedo decir que si visitas Isla mujeres y no asistes a este maravilloso restaurante, te pierdes de la mejor cena de tu vida... Amenizado con música suave de guitarra a un buen volumen donde puedes platicar, todo generó una experiencia única, gracias por poner todo para nuestro festejo especial.