El hotel es muy bonito. La habitación superior con cama doble que seleccionamos estaba limpia, organizada y era muy cómoda. Sin embargo, recomendamos revisar y organizar el personal que se encuentra actualmente frente a la atención de los huéspedes, y re acomodar el horario del desayuno, se sirve demasiado tarde.
La persona que nos recibió al llegar al hotel y nos ubico en la habitación fue una señora, quien a su vez es la encargada de realizar los aseos de las habitaciones. Instalados en el hotel, y con todo respeto, lamentablemente nos siguió atendiendo la señorita Andrea, quien no solo fue poco amable al atendernos, sino que fue muy negligente al brindarnos información. Nuestro deseo era ir a los termales, y nos hizo, sin sugerencias y nada más, una factura para ir el mismo día, y la poca información que recibimos fue porque preguntamos.
Al día siguiente, la señorita Andrea fue quien nos atendió, hizo y sirvió los desayunos, y desafortunadamente no solo se demoro demasiado, sino que nos trajo los cubiertos y uno de los pocillos sucios. Más tarde, para irnos a los termales nos brindo información errada acerca de donde cogeríamos el transporte, haciéndonos esperar casi dos horas un transporte que nunca paso.
Por ende no solo llegamos tarde a los termales sino al hotel, teniendo presente que nos correspondía pagar horas adicionales. Mientras nos alistábamos para irnos, la señorita Andrea nos mando a cobrar las horas adicionales a la habitación, con la señora del aseo, y a preguntar que si era que íbamos a pasar una noche más, teniendo ella el pleno conocimiento que ese mismo día viajábamos. Tristemente que mala atención y que falta de respeto; nos sentimos echados del hotel.
Muy bonito hotel, pero que atención tan pésima.