El hotel es una casona tipica del pais vasco muy bien renovada. Esta justo en el paseo de la playa y a dos pasos del centro. Se puede ir a pie en menos de 5 minutos a la zona comercial y hay un monton de restaurantes y bares por la zona. La decoracion de las habitaciones es tradicional y sencilla pero muy agradable. Nosotros teniamos un pequeno balcon mirando al mar que me encanto. La limpieza impecable. Tienen parking que es una ventaja teniendo en cuenta lo dificil que es aparcar por la zona. El trato de los trabajadores del hotel muy correcto y hablan ingles y espanol. Muy buena relacion calidad-precio. Si volvemos a San Juan de Luz nos alojaremos aqui =)