Fuimos a pasar unos días a San Juan de Luz, y tras mucho leer y revisar, optamos por este hotel, porque nos pareció correcto y cerca del centro para el resto de oferta que quedaba libre en Semana Santa. Pagamos un plus para una habitación superior, y, aunque somos conscientes de que tiene 2*, nos esperábamos algo un poco mejor. La habitación era pequeña, lo cual no es importante si vas a dormir, y tenía una botella de agua gratis de bienvenida (detalle fantástico!). Lo extraño fue encontrar dos cajitas de tapones de oídos. Lo entendimos a la mañana siguiente, cuando empezó a sonar un desagüe y la aspiradora de la limpieza a las 8 de la mañana. Por otro lado, el baño necesita una buena reforma, y algo más que una simple pastilla de jabón como amenities. Hoy en día, hasta en un hostal encuentras unos sobres con gel y champú. Como puntos positivos, diré que la cama era enorme (eran dos juntas) y cómoda, y aunque la habitación tenía una ventana diminuta, nos fue suficiente con encender La Luz (aunque era necesario incluso de día). Decidimos no desayunar en el hotel, así que de ese aspecto no tengo opinión. Si tuviera que volver a ese lugar, probablemente elegiría otra opción.