Lo peor! Reservamos una mesa viernes medio día, llegamos, el restaurante vacío, un cartel en la puerta con el menú del día. Cuando le decimos a la camarera que queremos tomar el menú nos dice que no porque hemos reservado mesa, le decimos que el restaurante está totalmente vacío. Le pregunto, “ cualquiera que entre ahora mismo se puede sentar y pedir el menú del día” y me dice “sí, pero vosotros no”, le dije que entonces nos ibamos y se quedó tan pancha. Nunca he visto tan lamentable actitud para llevar un negocio. En fin ya me he asegurado de que ni familia ni amigos pongan un pié ahí. Por cierto al llegar casi nos vamos por la música, radio reguetón a todo volumen. Nunca más!