Hotel en pleno centro de la ciudad, justo al lado de la Porta Nova y al lado de una pequeña plaza, es en zona peatonal,aunque cerca tiene zona para poder aparcar cómodamente,incluso cerca existe parking cubierto a muy buen precio. El hotel muy chulo,limpio,luminoso y agradable. Habitaciones confortables,camas muy cómodas, zona de ducha con buena presión de agua,amenities de aseo y toallas impecables. Desayuno incluido,muy completo y variado ,con productos de buena calidad. El personal de 10,muy servicial y atento,siempre con ganas de informar y ayudar en todo lo que se les plantea. Relación calidad -precio insuperable. Desde luego si volvemos a Braga sin duda repetiríamos. Muy recomendable
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