Hotel excelentemente ubicado en el centro de Bogotá. Es pequeño y sencillo pero muy cómodo y bonito. Cerca del planetario, el museo del oro, mercado de las pulgas, mercado de artesanías,y caminando un poquito más está la plaza Bolívar, casa de la moneda y museo de Botero.
Las personas que trabajan aquí son muy amables, los recepcionistas Marisol Álvarez, David y Fabian excelentes personas y sobre todo el Sr. Leonardo como administrador. Siempre atentos, asesorando y haciéndo recomendaciones por lo que se necesite. Lástima por las camaristas.
- Wi-Fi gratis
- Restaurante
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