Me hospede con mis dos niños por el fin de semana, y cero protocolos, no toman la temperatura, nadie usa tapabocas, aglomeración en la piscina, no hay piscinero, o si hay, esta pendiente es del bar, una locura total, se supone que la piscina es solo para huéspedes había mucha gente de pasadía, borrachos en la piscina, teniendo relaciones sin que nadie les diga nada, para eso están las fincas privadas y ni eso, cero respeto ante los huéspedes y familias, la noche fue una pesadilla, carros con música a todo volumen hasta las 3am, definitivamente pensé que era un hotel familiar.