Hermoso hotel colonial, habitaciones amplias, cómodas, hermosamente decoradas, el aire acondicionado siempre encendido. Muy limpio. La atención de Larry (conserje de noche) y las mucamas fue excelente, super amables, atentos a cualquier necesidad. Desayuno rico, variado y abundante.
La ubicación es muy buena, cercano a todas las principales atracciones y la vista desde la terraza hacia Bocagrande es espectacular, pero el problema es que hotel se encuentra rodeado de discotecas, por lo tanto el lugar es demasiado ruidoso (si es que buscas tranquilidad)
MARTIN, el conserje que nos recibió a nuestra llegada no fue muy resolutivo en cuanto a un planteo que le hicimos, tampoco nos explico como era el uso del jacuzzi que hay en la terraza, no nos dijo que había que sacar turno y un día lo vimos desocupado y fuimos, al rato llegaron 2 huéspedes muy desagradables que fueron a quejarse que estábamos ahí, y Martin vino a decirnos que nos había explicado como era la política de uso (CUANDO EN REALIDAD NUNCA LO HIZO) Y POR SUPUESTO TUVIMOS QUE RETIRARNOS.
Desde ya que con MARTIN no tuvimos buen trato desde nuestra llegada y hasta algo despectivo respecto a nuestra nacionalidad. Quedamos muy desconformes con su atención.
Por esta situación y por lo ruidosa que es la zona por todas las discotecas que hay alrededor es que no volvería a hospedarme.