El mejor hotel boutique que hemos estado! Ubicado en la calle más bonita de la ciudad amurallada, cercano a los mejores restaurantes de la zona. Destacar la atención y cordialidad de todos empleados del hotel. Cristian de la recepción un 10, y la atención y preocupación de Germán y Jason en el desayuno y bar excelente. Lo mismo para el personal de cocina y limpieza, excelente.
Mi esposo estaba de cumpleaños y ese día al desayuno nos sorprendieron con una Torta, vela y le cantaron. Se nota la preocupación por los huéspedes.
Las instalaciones acogedoras, limpias y muy bonitas. La habitación preciosa, grande, y bien equipada con todo lo necesario.
Llegamos al hotel antes de la hora del checkin, pudimos dejar las maletas y nos facilitaron un baño con ducha y después nos quedamos en la piscina hasta que nuestra habitación estuvo lista. Eso se agradece especialmente.
Sin duda recomiendo a ojos cerrados este hotel y volvería mil veces más. Además Cartagena es una ciudad maravillosa.