Muy buena ubicación, la hospitalidad de Atanasio es muy buena, las habitaciones no son lujosas pero tienen todo lo necesario, dan directo al mar y al cayo cangrejo. No hay playa pero se puede nadar y hacer snorkel o ir en kayak o lancha hasta el cayo. Internet anda un poco mal en toda esta parte de la isla
La ubicacion de la posada es increible, sin embargo necesitaras alquilar una moto (50 mil pesos/dia) o un moto taxi (4 mil pesos/viaje) para transitar por la isla. Hay 3 habitaciones, las del primer piso son muy buenas, la que queda al nivel del mar un poco oscura (llegamos a esa y despues pasamos a la otra). Cuenta con TV, aire acondicionado (ese si casi no funciona, pero tiene un ventilador bien potente), cocina, baño y una terraza con vista al mar espetacular. El desayuno es muy bueno y Niqueishan la persona que ayuda en el dia a dia al dueño de la posada es una persona increible!! Siempre siempre de buen humor y con dos niños encantadores !! Ellos tienen kayaks para alquilar y estan al frente del cayo cangrejo. Super recomendable...
Me hospedé un par de noches aquí y la verdad que un lugar hermoso con una vista espectacular (a Isla Cangrejo). Muy buena hospitalidad de Don Atanasio, el dueño del lugar. Es un lugar para tomar un buen descanso y disfrutar de la tranquilidad absoluta. Muy recomendable!.
Es una posada sencilla, pero esta ubocada en un lugar super tranquilo y el paisaje - frente al Cayo Cangrejo- es de ensueño. Atanasio el dueño del lugar esta siempre muy atento y predispuesto para ayudarte en todo aquello que necesites
Nuestra experiencia fue muy agradable. La posada tiene muelle con salida al hermoso mar de la isla. Las habitaciones son frescas, cuentan con vista al mar y sus administradores son personas cálidas y colaboradoras. Es un lugar para escuchar el sonido del mar, alejado de la ciudad y del ruido. Es ideal para descansar. Antes de sus actividades, pueden deleitarse con el amanecer e ir remando hasta Cayo Cangrejo, que también es un lugar absolutamente hermoso y está muy cerca del hotel. No olvide llevar su careta para nadar junto a los peces y no se despida de Providencia sin ir a Cayo Cangrejo.
