El hotel está cerca del Mar de Galilea. Desde la ventana de nuestra habitación teníamos una vista espectacular al lago. La habitación era enorme con una cama muy grande y cómoda. Tenía un saloncito con un sofá y una nevera. También una tetera. La televisión de buen tamaño. El desayuno y la cena muy buenos. En general lo considero un buen hotel.Más
- Wi-Fi gratis