Si bien es un bar para la cata de vinos y Vicki y Matias saben un monton al respecto, nosotros fuimos dos noches a cenar en familia sin consumir alcohol.
La comida esta bien con altos y bajos dentro de un estandard razonable, las porciones son justas tendiendo a pequeñas y los precios son medios, no bajos.
Probamos el lomo con mil hojas , la cazuela de pollo, la bondiola braseada y las hamburguesas
Dado que las calificaciones en Trip Advisor pasan de Regular a Muy Bueno , seria injusto ir con la primera, no obstante para mi fue solo bueno.
Suman al lugar la buena onda de los que atienden. El resultado un satisfactorio