Desde hace meses habíamos querido visitar este lugar, finalmente logramos organizarnos con unos amigos y llegamos. Nos llevamos una gran decepción ya que no es como lo pintan, el lugar es súper pequeño, sucio (nos picaron pulgas en el cuarto) y no está en contacto con la naturaleza como nos imaginábamos. Quisimos vivir una experiencia de esas que prometen, pero después de esperar 4 horas nos dijeron que no se iba a poder. Lo que quiero decirles es que si lo que buscan es tener una experiencia mágica, no deben confiar en Jose!! Nos hizo esperar y trato muy mal, tanto que decidimos regresarnos por las mismas y a la final pagamos 40 dólares por 4 pancakes. Es posible que este haya sido un gran lugar en algún momento pero ahora definitivamente no lo es. La señora sigue siendo muy simpática e interesante pero ahí no hay nada que hacer.Más
- Estacionamiento gratis
- Piscina