Viaje en pareja idílico. Nos alojamos dos semanas, durante las cuales desde el primer hasta el último detalle han hecho de esta una experiencia única. Estamos completamente seguros de que no hubiera sido lo mismo si no hubiéramos contado con la ayuda y dedicación de las personas que hacen posible con su trabajo poder irte con este gran recuerdo y con muchas ganas de volver de nuevo. Aunque complicado nombrar a todos, quiero destacar en primer lugar a nuestro querido Wensky que desde el primer momento consiguió que nos sintiéramos como en casa, nos permitió conocer cada rincón, cada actividad y la dinámica del hotel entre otras, su disposición fue total. Estoy muy agradecida al papel tan importante que desempeñó ; En mi opinión, cumple una función vital que permite darle un plus esencial a esta experiencia. Dentro de la parte más administrativa, destacar la labor de Ingrid, una chica profesional, la cual desempeña su labor de manera óptima; Y Adriana, una chica que se hace querer desde su impecable trato al cliente y su humanidad, una chica 10 en todos los sentidos y absolutamente comprometida con su trabajo. No quiero olvidarme de nuestro camarero preferido Juan Jiménez, siempre pendiente de que no te falte de nada.. y de Gustavo, un profesional del sector de la hostelería y una bella persona. Todo bajo la coordinación de Oliver, que pendiente en cada momento de que todo estuviera en orden, y siempre con algún detalle permitieron también hacernos la estancia aún más agradable si cabe.

En cuanto a las instalaciones del hotel, todo genial, hay que tener cuenta la temporada de pandemia y que no todo es posible por la situación vivida, aún así, puedes disfrutar de muchas actividades y restaurantes con diferentes temáticas cada día.

Cuentas con muchísimos servicios como gym, spa, tenis... todo bajo unas medidas anti Covid exquisitas y una limpieza continuada, tanto de exteriores como de habitaciones y salas comunes . Mencionar que necesitábamos realizarnos un test Covid antes de partir a nuestro siguiente destino y nos permitieron hacerlo en el centro médico del hotel.

Lo dicho, excelente experiencia, súper recomendable y por supuesto deseando volver, con niños también !! porque cuenta con varios espacios para ellos muy chulos. Ojalá volver a vernos pronto . GRACIAS!

Andrea

Pasar un par de semanas en Punta Cana era en principio una vía para poder pasar unos días en Nueva York (dadas las restricciones americanas para ciudadanos de la UE), y término siento la mejor decisión de nuestro viaje.
Desde nuestra llegada hasta el día que nos fuimos, Oliver, el gerente del complejo, y todo su equipo, nos hicieron sentir como en casa. Las medidas de seguridad e higiene frente al COVID-19, nos dieron toda la tranquilidad para desconectar y disfrutar del paraíso que es Punta Cana.
Mención especial a la Sta. Adriana, pendiente de cada detalle en todo momento. Como consecuencia de la situación actual, algunas actividades de recreo no estaban disponible por prevención, pero el esfuerzo de Adriana para que no cayéramos en la rutina fue fabuloso. Habilitaron las pistas de tenis para nosotros, compraron bolas para que las estrenáramos y así asegurar plena seguridad, compraron juegos de mesa, que también estrenamos. No nos faltaba de nada.
Mención especial para Wensky, nuestro mayordomo, convertido ya en un amigo. 24/7 es decir poco. Dedicación total que nos resultaba increíble creer. Se nota cuanto alguien disfruta de su trabajo. Siempre iba un paso más para convertir nuestra estancia en un viaje que mi pareja y yo recordaremos siempre. Enumerar cada uno de los detalles que tuvo con nosotros harían que esta opinión nunca terminara. Ya he recomendado a muchos amigos este Resort, pero desde luego, si alguien desea cuidar cada detalle, es preciso busca a Wensky.
Juan Jiménez, pendiente de que no nos faltara bebida en la playa, Gustavo Vasquez en Quimera para que todo estuviera en su punto, y así un largo etcétera.
Oliver, gestiona el Resort a las mil maravillas, en una época en la que todo es más difícil de gestionar. Y todo ello, sacando siempre un momento para charlas con los clientes y hacernos sentir especiales. Gracias por tus continuas invitaciones a conocer otras partes del complejo.
Sin duda, volveremos a Melia Punta Cana, esperando que los ríenos futuros sean mejores para todos.
Millones de gracias!