Fuimos con mi novio a pasar un par de días en la tranquilidad de este hermoso hotel. Si realmente quieres paz, tranquilidad, cero ruido en un ambiente muy pintoresco, este lugar es excelente.
Descansamos muchísimo, se escucha solo el ruido de los pajaritos y las vistas son espectaculares. Está ubicado cerca de una carretera, pasan varios buses que te llevan al terminal y de ahí puedes tomar buses a los lugares que quieras, nosotros fuimos por el día a Salento, tomamos un tour del café, almorzamos allá y luego en la tarde regresamos.
En el hotel no hablan inglés, así que nadie se podía comunicar con mi novio; pero en general es servicio es muy bueno y amable.
Tuvimos un solo problema; el último día teníamos que tomar un vuelo desde Pereira, nos dijeron que el desayuno comenzaba a las 7, así que a las 7 estábamos esperando para poder irnos de ahí con desayuno y no tomar un vuelo sin haber comido nada; al parecer los tiempos en Colombia no son iguales a los que nosotros estamos acostumbrados. Eran las 7.15 y la persona de la cocina ni siquiera había llegado; no pudimos esperar más y nos fuimos.
Si tienen que tomar un vuelo temprano, no cuenten con el desayuno a tiempo, no comienza a la hora que dicen, es lo único que podría criticar.