El hotel es hermoso, la decoración , los ambientes y la comodidad es muy buena , pero teniendo todo el potencial para ser excelentes en todo, la atención al cliente no se ve.
Llegamos a las 5 pm y al parecer no tenían lista la habitación, o eso pensamos, ya que nos dejaron esperando mucho rato y si no vamos a la recepción nuevamente para informar que la estábamos esperando no nos la entregan.
No ayudan a subir las maletas por las escaleras aunque están viendo .. eso es descortés para el precio que se paga. Íbamos con niños pequeños así que entre mi esposo y yo subimos todo.
La puerta de la habitación no tiene chapa , no dan llaves ni tarjeta como dan cualquier otro hotel, se atascó y para abrir tuvo que entrar una persona por la ventana y en otro caso uno de nuestros niños.
En la piscina nadie pregunta si necesitas algo . Da la sensación de, ya están aquí, si piden algo los atendemos, en tres noches, arreglaron las camas, pero no limpian el piso .. es regular el aseo, no son atentos ni en las zonas comunes ni en el comedor, el precio es alto para tan poca atención.. la estructurara no lo es todo , tienen todo para ser excelentes pero les falta calidad humana, ojalá la mejoren por que el sitio es bellísimo .