Todo perfecto, la casa genial, el entorno ideal y la propietaria un encanto y muy atenta. Una Semana Santa perfecta.
Estuve con mi mujer y mi nieta en esta cuidada casa a la que no le falta detalle.
Tres plantas; en la baja una espaciosa estancia con cocina de leña para calentar la estancia y vitro para cocinar, la primera un saloncito y una habitacion con cama de 135 y una estufa de pellets y la última el dormitorio principal muy espacioso.
Las vistas desde la casa espectaculares y el entorno te invita a pasear.
Gracias Dori por estos dias de tranquilidad y seguro que pronto repetiremos.