Este hotel aunque viejo, esta adaptado a todas las comodidades modernas sin olvidar lo tradicional. Excelente trato del personal, limpieza y unas amenidades que todo viajero necesita. Piscina, gimnasio, spa, restaurantes, entre otras facilidades. Buenos precios y excelente ubicación cerca del gas lamp quarter.

Mi habitación ubicada en la planta 15 tenía unas vistas espectaculares de la ciudad. Ubicado en el corazón de Gaslamp Quarter, queda muy cerca de los restaurantes, centros comerciales, estaciones de tram y a 15 minutos del centro de convenciones. Habitación muy amplia, luminosa y bien equipada. El baño también era muy grande. Destacan la comodidad de la cama y sus almohadas, así como el resto de equipación. El hotel es clásico, de apariencia lujosa y pomposa, con todo tipo de instalaciones, incluido spa y piscinas. Lo único que no recomendaría es el bufé del hotel, poco económico por la variedad disponible, pero al lado del hotel se pueden encontrar muchas cafeterías con menús deliciosos, entre ellas la Corner Bakery.

Tienes que adaptarte a principios del siglo para disfrutar de la belleza y exclusividad de este hotel. Sobrio, elegante...él Westgate te recibe con aires de jazz y con una decoración y un mobiliario exquisitos. La habitación, la ubicación, la piscina, el bar, el personal de recepción, el parking y sobre todo el personal de limpieza y habitaciones son encantadores y muy profesionales. Al lado del bullicioso Gaslamp Quarter con sus restaurantes y bares, al lado del embarcadero, el sea village y la 5 interstate para desplazarte rápidamente a cualquier sitio. Déjate llevar por el cameleon y adáptate al jazz, al surf, al rock y al embrujo de San Diego y southern California. Un 10 en todo.