Visitamos agur-deneri en marzo, casualmente fue un fin de semana que hizo buenísimo así que disfrutamos también de la visita de Ziburu y Donibane Lohizune (del que se encuentra a unos 15min andando).
EL hotel tiene aparcamiento propio, y al llegar a Ziburu hay continuamente indicaciones para llegar al hotel tras el ascenso de la montaña. En recepción hablan francés, y el desayuno (casero riquísimo) cuesta unos 7euros/persona extra: mermeladas de varios tipos, cuajada, nocilla, bollería, pan tostado, café, chocolate caliente, té... Cogimos una habitación con terracita y vistas al mar. No son tan directas como parecía en las fotos, dado que el hotel se encuentra un poco ladeado, pero aún son una maravilla!! La habitación limpia, bien decorada, con bañera de hidromasaje para dos... Sin duda, volveremos cuando sea posible!! :)