Nos alojamos en familia en esta casa y desde el primer momento nos decepcionó; Está lejos de todo, hace falta el coche para ir a cualquier sitio, y aparcar en Peñíscola supone pagar porque es todo zona azul. La zona exterior -que queda reducida al mínimo si se aparca un coche dentro- y la piscina (pequeña) no estaría mal si no fuese porque está infestada de moscas y mosquitos, apenas pudimos estar fuera de casa y aún así volvimos acribillados. Las habitaciones son pequeñas, las tres en la planta alta (hay que subir y bajar escaleras sí o sí) y además para llegar a una de las habitaciones hay que pasar por otra (privacidad nula).
El diferencial eléctrico, por la escasa potencia contratada, salta si se ponen en marcha a la vez dos fuegos de la vitrocerámica y la lavadora, así que no hay que pensar en la posibilidad de hacer una "vida familiar normal" si se son más de dos personas.
Todo el mobiliario es muy viejo y poco práctico; El sofá (de dos plazas para una casa que se supone tiene capacidad de hasta ocho personas ¿?) además de diminuto es incomodísimo y las camas de matrimonio son de 1,35 y cortas (de 1,90) con colchones viejísimos que se hunden por el medio y en los que es imposible descansar. Con todo, lo peor es que, como se observa en las fotos, nos encontramos la casa llena de suciedad de todo tipo; polvo, pelos de mascota, pelos humanos por el baño, excrementos (espero que de perro) en el exterior... como si no hubiesen limpiado en absoluto. La ropa de cama casi se transparenta de los años que tiene y las toallas también tienen mucha historia que contar, como atestiguan varias manchas de lejía.
El propietario al principio parecía solícito, pero en cuanto publiqué mi opinión en booking, con la sinceridad con la que lo hago siempre, se enfadó y se revolvió sacando su auténtica cara, acusándonos de un desperfecto absurdo con el que por supuesto no tuvimos nada que ver. Según él, mi opinión es la de una persona impresentable porque "en este país la mayoría de los colchones son de 1,90"; pues quizá hace cuarenta años era así, hoy no... En todo caso creo que está bien que la gente sepa lo que va a alquilar.
En resumen, una mala experiencia con el sitio, con el servicio y con el propietario, por lo que no aconsejaría a nadie alojarse aquí.