El lugar ideal para los que amamos la naturaleza y nos gusta disfrutarla a full. Cabañas muy cómodas con vistas impresionantes hacia las montañas donde domina el bosque nuboso. Un paraiso para los avistamientos de todo tipo de aves.
Por si todo esto fuera poco la atención personalizada de David y Ana, los propietarios, y todo su staff es espectacular, brindando los mejores consejos para disfrutar las distintas actividades (que son muchas) que se pueden realizar en el entorno, aunque la belleza de las vistas y la comodidad de las cabañas invitan a quedarse, más cuando los pájaros nos visitan contínuamente.
Excelente desayuno y comidas. Se nos ofreció hacer birdwatching, a lo que accedimos, para lo cual contratan un guía profesional que nos permite aprovechar al máximo la experiencia. En las cercanías se encuentra el "Santuario de las Cascadas" donde hay senderos hermosos para recorrer. Para los amantes de la aventura en los alrededores hay muchas opciones, como ser rafting, rapel, tirolesa etc., etc.
Mindo es un lugar que merece quedarse varios días, y Las Terrazas de Dana un lugar comodísimo para alojarse. Lo recomiendo!!!