Si buscas un hotel con vistas al mar, salida del sol (algunas habitaciones) con encanto y buen trato ésta es la opción.
Reservamos la habitación con terraza con vistas al mar,,, lastima que no era la mejor de las 3 o 4 que tienen ya que queríamos ver la salida del sol y fue un poco complicado desde la terraza (pero puedes bajar a la terraza del hotel a verlo).
La habitación es grande, decorada con gusto y la cama súper cómoda.
El desayuno que viene incluido está muy bien, incluso demasiado. Te sientan en el restaurante y traen una bandeja que tiene de todo, de dulce a salado.
Tienen parking para los huéspedes del hotel, lo digo por si llegáis y veis que el parking general está completo (suele pasar por el restaurante).
El personal muy amable, todos te hacen sentir cómodo.
Volveremos , esta vez ya sabemos que número de habitación pedir ;)