En nuestras vacaciones, nos alojamos con mi marido, mi hija, y mi hijo en el Hotel Iberostar Hacienda Dominicus por segunda vez (anteriormente en 2019), desde el día 16/01 al 28/01/23.
Elegimos este destino y este Hotel para celebrar nuestros 25 años de casados.
Desde el momento de la llegada hasta la salida todo fue maravillosol"!!!!!!!! En el check in fuimos atendidos por Francisco, quien nos recibió con muy buena predisposición y fue amable con nosotros; nos designó al bloque 6 con lo cual, nos encontrábamos a medio camino de ir hacia la playa como de ir hacia el buffet .
No podemos dejar de mencionar a Marisol (Concierge), tan afectuosa y simpática!!! Destacamos la eficiencia y cordialidad con la que Marisol nos facilitó y resolvió todo, ya sean sus asesoramientos, reservas a los restaurantes, ciertos detalles y además los obsequios que nos hizo!!!Muy contentos por su buen servicio-
Las habitaciones excelentes, con todo el confort, cambiando todos los días los diseños de las toallas decoradas con flores, decoración en las cortinas; realmente muy cómodas, nos tocò en el primer piso , con vista a la laguna!!!!
El Hotel es atractivo, con estilo colonial. Cuenta con inmensos jardines súper cuidados, con plantas y flores bellísimas Ademàs, cuenta con animales como flamencos,, patos, gallaretas y elegantes pavos reales, que te permiten estar en contacto con una variada flora y fauna que lo hacen un hotel fuera de lo tradicional
La playa es paradisíaca!!!!! de arena blanca,impecable...y no es casual, ya que en ciertos horarios hay personal que rastilla la playa, como Alexis muy afectuoso y cordial, deja la arena limpia e inmejorable!!
El color del agua del mar Caribe es increíble, libre de sargazo; aguas calmas, de color verde turquesa y en la que se pueden apreciar diferentes variedades de peces, una maravilla!!!!! Los atardeceres, imperdibles!!!
La atención de todo el personal es admirable, siempre una sonrisa y buena predisposición de todos en general, pero, queremos distinguir a Emilio del bar Vip, sumamente correcto, atento, que prepara unos tragos exquisitos y con una amabilidad increíble¡¡¡¡ pidan por él que es un genio!!!!!
También, te vas a encontrar con Domingo, es un personaje lindo, súper simpático, que cada dos palabras sonríe y te contagia con su risa, le deberían dar el rol de "Relaciones publicas" ya que es gracioso, extrovertido y enseguida crea un buen vínculo con todos.
Sobre la playa, se encuentra el encantador bar "El Faro", a orillas del mar y en el que se realiza una vez a la semana la "Fiesta de la piña colada" con degustación de esta bebida, por supuesto, y música en vivo. De dicho Bar queremos destacar a Carlos (a vaces estaba en La Sombrita), quien siempre nos consentía con los tragos y a Isaías, quien nos brindaba la mejor atención en El Faro , en el horario de la tarde y quien algunas noches, estaba en el Lobby Bar Trapiche, dándole siempre un toque de distinción a los tragos; ambos con muy buena onda, siempre con una sonrisa y de buen humor, muy respetuosos e incansables, recorriendo la playa de punta a punta, atendiendo cordialmente a los huéspedes!!!!
El Hotel cuenta con un buffet "El Ingenio" y cuatro restaurantes a la carta en los que podés disfrutar de la cocina mexicana "La Hacienda"; japonesa "La Geisha"; "Buffet e italiano La Spiaggia"; "El Colonial" con platos gourmet. Después, en la zona de la playa tenés el Snack bar "La Sombrita" ; en la playa además de la típica paella, todos los días había barbacoa, carnes asadas, pescados,langosta ,verduras, etc.
Los restaurantes a la carta te dan como un·"aire variedad" en el correr de los dìas, ya sea porque cada uno tiene su especialidad, para cambiar un poco de paisaje y no ir a cenar todas las noches al mismo restaurante. A mi hija y a mi nos encanta la cocina italiana asì que disfrutamos de la cena de "La Spiaggia" que estuvo bastante correcta. Este restaurante funciona tambièn de 12 a 16 hs pero aunque està en cercanìa de la playa, no tiene mucha variedad de comida; nosotros preferìamos caminar màs, e ir a El Ingenio, En El Colonial te sirven cocina francesa, es rico pero si sos de buen comer, te vas a quedar con un poco de hambre porque las porciones son reducidas, jaja!! A mi hijo y a mi marido les encanta la comida mexicana pero nos pareciò muy pobre la carta; por ejemplo, solo podìas elegir entre dos variedades de tacos y casi todo el menù, era extremadamente picante (hasta en Mèxico hay opciones sin picante). El restaurante japonès ofrece show, en donde interactùas con el chef y con el resto de los comensales, que estàn sentados alrdedor de la plancha; la comida es rica, abundante, sobre todos los mariscos!!
Los dìas que no tenìamos cena en los restaurantes a la carta, comíamos en el buffet; la comida que encontrás es para todos los gustos, aunque a veces faltaba variedad y era un tanto reiterativa (en comparaciòn cuando estuvimos la vez anterior) ...pero ...zafa
También, el hotel cuenta con bares: "La Sirena" ubicado dentro y fuera de la piscina(a la tarde se juega al bingo), el del Lobby "trapiche" (Aquì los tragos son mejortes, sobre todo si los prepara Isaìas) y mientras estés disfrutando de los shows cada noche, tenés "Los Arcos" (aunque no todas las noches hay show en el teatro). Para los amantes del baile cuentan con la disco "Capitán Nemo", aunque cuando estuvimos nosotros, no habìa mucha "movida" ahì.
Sin lugar a dudas, nuestro punto obligado de todas las tardes para la merienda era el "Starcafé" (està abiero las 24 hs), imperdible!!!!!!!!!!con capuchinos, frapuccinos,té helados y variedad de delicatessen para disfrutar!!!! Aquì nos reencontramos con el Sr. Marcelino quien siempre su trato para con nosotros fue cordial y atento.
La animación divertida pero "hasta ahì"; entre ellos queremos mencionar a Marcia, a "Sexy Black", a Rigoberto que, sin dudas, por lejos es quien mejor baila y tiene la mejor capacidad de sonreír, siempre con "buena vibra" y brindando lo mejor de sí. Sin embargo, la "frutilla de la torta" es Lenny, siempre con un toque de gracia, espontàneo, contagiando su buena energìa, ademàs un catntante espectacular, todo un "Showman", deberían dejarlo cantar más seguido en los espectáculos del hotel.
En esta ocasión, no pudimos vivenciar la "Fiesta de la espuma" en la piscina, ya que ahora la hacen cada 15 días y el sábado que nos tocó estar, había espectáculo de circo y al siguiente, nosotros viajamos de regreso a nuestro país. Deberían tener en cuenta que no todas las personas pueden quedarse hospedados por dos semanas y más allá de esto, espectáculos de circo se pueden ver en todos los países, en cambio, la fiesta de la espuma en una piscina, no es algo que se dé frecuentemente, solo en destinos como este.
De todos modos el Hotel es perfecto para familias y nosotros estuvimos màs que felices como huèspedes, el haber pasado nuevamente por la experiencia donde nuestra estadía fue totalmente placentera, rodeados de gente linda que te invita a tener deseos de siempre querer volver al Hacienda Dominicus!!!