Buena ubicación, aunque rodeado de dos rascacielos. Personal bastante más amable y resolutivo que hace unos meses!
Actualmente en obras con un poco de ruido, pero lo compensan con „upgrades“ de habitaciones.
El desayuno muy completo. Restaurante con comida elaborada y servicio rápido a pesar de estar lleno!
Bonito salón y piscina!
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Ubicado en la costa brava de cataluña excelentecstencion en su restaurante Cala Edtreta, de entrada mini croquetas de chipiron en su tinta y emulsion de ajos tostados exqyisito sabor y suavidad. Paella basica pero con poca proteina. Postre helado casero muy suave y rico.
Atencion al publico y ganas de trabajar pesimo, soy cliente del hotel tanto en restaurante como en el hotel, y para una vez que pido un cafe y una copa me dicen que no, que como no estoy alojado en el mismo dia que no me sirven. Mas pierden ellos que yo . Pesimo.
Lo único positivo, la inmejorable ubicación. En cuanto a las instalaciones dejan mucho que desear para un 4 estrelllas. Anticuadas, falta de mantenimiento desde la recepción y hall hasta las habitaciones con suelos viejos, baños con accesorios de baja calidad, balcones con mobiliario poco confortable, pintura….. En definitiva, muy caro para lo que ofrecen. La dirección debería visitar hoteles de su categoría para tomar medidas a mejorar.
Lamentable. Este cambio de propiedad está afectando a marchas forzadas todo lo que durabte años fue este emblemático hotel. Aqui ya se ve que priman los números: dejadez, falta de pintura, de plantas, de personal, de comida (vaya desayuno!), de limpieza...
Y el personal de recepción no está a la altura. Tú eres un número de habitación con dia de entrada y salida. La satisfacción u opinión no les importa.
Y, desde luego, los precios actuales NO están acorde al servicio. Ni la minitv ni minibar ni amenities. Nada.
Hemos estado una semana en agosto por segundo año. El precio no se corresponde con la calidad ni con los servicios. Las hamacas de la piscina son insuficientes para el número de huéspedes y, aunque no está permitido reservarlas, nadie se ocupa de controlarlo, con lo que a primera hora ya hay un montón de ellas “reservadas” por los huéspedes mas veteranos, que ya no las abandonarán en todo el día. La tarima de la piscina está en muy mal estado y aún llevo una astilla clavada en el pie. Creo que el año que viene no repetiremos. El desayuno está bien pero es poco variado. El personal es lo mejor, súper amable.
