Es un hotel muy lindo, limpio, tiene un ambiente que inspira tranquilidad por la naturaleza que lo rodea. Sus instalaciones son muy acogedoras y bellamente decoradas. Tiene una piscina amplia y muy refrescante. La habitación en que nos hospedamos fue cómoda, limpia, el baño adecuado y tiene ventilador y aire acondicionado, las camas a mi gusto me parecieron un poco duras pero igual descansamos bien. El desayuno estuvo rico y suficiente, el restaurante tiene una carta amplia pero me parece un poco limitada en cuanto a los acompañamientos, papas francesas y ensalada en su mayoría y en cuanto a precios un poco elevados como la mayoría de hoteles, pero lo que comimos nos pareció de buen sabor, también cierran temprano entonces si se quiere comer más tarde es necesario salir a buscar, aunque en Melgar no hay mucha variedad gastronómica. Me gustó muchísimo la atención del personal del hotel, siempre fueron muy amables, atentos y dispuestos a solucionar cualquier requerimiento. El hotel cuenta con parqueadero y se ubica en una zona muy tranquila pero cercana al comercio y sitios de interés para desplazarse caminando. Es una muy buena opción para hospedarse en Melgar!Más
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis