La casa está situada muy cerca de Santiago de Compostela, pero en una zona rural, con muy buenas comunicaciones para poder desplazarse a cualquier parte de Galicia, por lo que se convierte en una muy buena opción, donde descansar y relajarse después de hacer turismo.
Todo está impecablemente limpio y con una decoración muy cuidada, que combina la piedra y la madera a la perfección, con un aire moderno y funcional, que permite crear un ambiente acogedor y muy, muy agradable.
Los dueños son personal muy cercanas, y muy detallistas, que hacen que la estancia sea perfecta. Totalmente recomendable!!